domingo, 19 de abril de 2009

Canciones de despedida



Serás recuerdo, y nostalgia.

Siempre oculto en un hueco de mi mente, con tu sitio fijo por tantos años de habitual. Serás los puntos de una prosa que no es prosa y que no es poesía, separando frases como versos, párrafos como estrofas, creando una extraña armonía

Mi particular melodía.

El sonido de mis pensamientos grabados a fuego. Lentamente cocinados en el transcurso de los años, de las experiencias, penas, alegrías. Y tú siempre en medio, como un eje de simetría.

Serás la firma de una obra siempre inacabada, el borrón y el nombre personal que sólo conoce la autora, el mote cariñoso de los amantes, una contraseña secreta.

Llevaré tu nombre como un lastre, serás cicatriz de guerra y clave para entenderla, motivo del desenlace y del estallido, la tregua de paz y el conflicto inicial.

Serás unos ojos negros que me persigan en las noches negras, serás una risa conocida en los triunfos, la palmada que me falte en los logros, la sonrisa nunca recibida en los cumpleaños y el abrazo que sólo recordaré en las pérdidas. Serás porque has sido, porque como la palabra mil veces repetida quedaste clavado, una huella en mi vida.



Y serás porque mi mente necesita una inspiración, porque sin motivo mis palabras no encontrarán jamás pasión, porque fuiste el inicio y tras el final, quedó algo de calor.
Y serás porque hay cosas que nunca se olvidan, amigos que al dejar de serlo contemplas con la mirada fría de aquellos que perdieron lo que querían, les arrebataron algo importante en su vida



Tú serás y no me importa que seas, te dejo recorrer mi futuro en paz
La paz de saber conciliar, dejar correr, dejar machar. Dejar las cosas pasar como deben pasar, la gente irse para no volver más.
Dejarles irse, si es lo que quieren hacer.


Nada mío de ti va a depender